Caminando por el lado libre de drogas
EN MARCHALos participantes de la ciudad de Kaohsiung comenzaron su caminata de “Libre de drogas por mí”, mostrando orgullosamente letreros proclamando su compromiso por un Taiwán libre de drogas. Marchando con ellos hubo miembros de la Iglesia de Scientology de Kaohsiung y voluntarios de un Mundo Libre de Drogas apoyados por la iglesia.

TAIWÁN

Caminando por el Lado Libre de Drogas

Por cada persona adicta a las drogas hay una familia destruida. Este fue el mensaje de las multitudes taiwanesas que marcharon por las calles de la ciudad de Kaohsiung en marzo de 2017. La caminata fue patrocinada por el departamento de policía de la ciudad, el Club de Leones Internacional y la Iglesia de Scientology de Kaohsiung, con la participación de la Fundación por un Mundo Libre de Drogas.

Caminando por el lado libre de drogas
CAMINANTES ORGULLOSOS Los alumnos de la ciudad de Kaohsiung en la caminata antidrogas de “Libre de drogas por mí”.

La fuerza policial de la ciudad hizo un elaborado trabajo por entretener a los espectadores. Sus presentaciones incluyeron un espectáculo del Equipo de la Policía Montada, seguido de un desfile de la Unidad de Motocicletas de la Policía. Para no quedarse atrás, el Equipo de Tareas Especiales de la Policía de la ciudad hizo muestra de sus destrezas de combate de artes marciales. El último espectáculo patrocinado por la policía fue una demostración de los perros detectives antidrogas de Bo-Shan.

Caminantes Orgullosos
PENSANDO IGUAL La Iglesia de Scientology de Kaohsiung ayudó a organizar una reunión de educación sobre las drogas y a la que se unió la policía local para difundir el mensaje de vivir libre de drogas.
Pensando igual

También los niños locales participaron en el acto. El equipo de tambores de samba de la escuela primaria Chien-Shan entretuvo a los espectadores con sus alegres ritmos. Fueron seguidos por el equipo de tambores Taiko de la escuela secundaria Feng-Shian.

También conocida como la caminata antidrogas “Libre de drogas por mí”, el evento enfatizó su mensaje de que las drogas no solo dañan la salud mental y física de los consumidores, sino que crean también una tragedia para los amigos y familiares del usuario. Se prestó especial atención a la inquietante tendencia de consumir drogas entre los muy jóvenes. Esto es amplificado por el hecho de que las drogas ahora vienen empaquetadas como dulces y galletas, lo cual ha empezado a cobrar las vidas de niños en Taiwán.

El fiscal principal de la ciudad, Chang-Chin Chou, se dirigió a los participantes y espectadores sobre cómo los jóvenes pueden hacer frente a la presión y rechazar las drogas. Después de eso los espectadores y los miembros del desfile inundaron los numerosos puestos de comida y atracciones, compartiendo la campaña de salud contra las drogas.